En su país, en su cultura, ¿Cuáles son los temas para iniciar una conversación? ¿Son los mismos independientemente de si conocemos poco o mucho al interlocutor? ¿Entramos en detalles en las primeras conversaciones? ¿Hay temas tabús? ¿Es importante la mirada?
No iniciamos de la misma manera la conversación con personas que ya conocemos que con aquellas que encontramos por primera o segunda vez. El « tu » (« te », « ton », « ta », « tes ») se utiliza rápidamente entre personas de menos de 30 años, de lo contrario el « vous » (« votre », « vos ») se impone ante una situación formal.
Además, con las personas de edad más avanzada, el « vous » se debe utilizar, mientras que con las personas más jóvenes o de la misma edad, podemos utilizar « tu », incluso si no nos conocemos bien. La mirada hacia los ojos del interlocutor, los gestos, la distancia mayor o menor entre las personas proporcionan también información (simpatía, timidez, miedo).
La manera de iniciar una conversación o de hablar acerca de un nuevo tema depende enteramente de la relación entre las personas y de la situación. No existen las fórmulas hechas.
Para un primer encuentro, podemos pedir a la persona si vive en el barrio, si trabaja y si la respuesta es si, en que sector. Podemos hablar del ambiente del barrio, del lugar de trabajo, de sus costumbres en la tienda, en el café o en el restaurante. En lugar público, podemos preguntar acerca de lo que pasa, hablar de los hábitos de frecuentación de este lugar, expresar un sentimiento general. No hacemos preguntas demasiado precisas si sentimos que el interlocutor responde de manera breve. No hacemos preguntas relativas al sueldo; no hablamos de religión, ni de sexo.
Una próxima vez durante un nuevo encuentro, podemos preguntar a la persona que tal está, hablar del tiempo, y podemos pedirle una información o un consejo.
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